A las cinco de la tarde de ayer visitamos el velatorio del vecino Rodolfo Córdova Jarpa (Q.E.P.D.), que se ubica en la casa de su madre en calle Uberlinda Goldberg Nr. 1214, de la Villa El Progreso.
Conversamos con su viuda Dorka que presenta un embarazo de unos cinco meses. Dice que al igual que todos los días, su marido llegó del trabajo cerca de las ocho de la tarde. Ella lo llamó a tomar once, pero él salió al patio manifestándole que se quería suicidar al igual que su padre. Pasarían unos diez minutos y lo salió a buscar alrededor de la casa, encontrándolo pendiendo de su cinturón desde la rama de un álamo ubicado al costado poniente de la casa. A sus pies y rota se encontraba la silla de coligue que utilizó para subirse.
Se abrazó a su cuerpo y pidió auxilio a grandes gritos hasta que unos vecinos ubicados a unos cien metros la escucharon y la socorrieron. La tragedia se había desencadenado.
Su hermana nos dijo que para el día de todos los santos estuvo toda la familia reunida y que Rodolfo se mostró muy animoso y contento, compartiendo la jornada en una larga mesa junto a todos. Nada hacía presagiar lo que ocurriría.
Su funeral se efectuará esta tarde, entre las tres y las cuatro se nos dijo, en el cementerio de Quillón, porque la familia es originaria de Huacamalá en Cerro Negro.